Cuando la migraña no te deja vivir: ¿Cómo funciona el tratamiento preventivo?
- Dra. Charinna Di Vanna Duran, Neuróloga- Internista.

- hace 4 días
- 3 Min. de lectura
Si sientes que tus migrañas aparecen una y otra vez, afectando tu trabajo, tu descanso y tu vida diaria, es posible que tu cerebro esté pidiendo una estrategia distinta: no solo tratar el dolor cuando llega, sino aprender a prevenirlo.
¿Qué es la migraña episódica y por qué puede necesitar prevención?

La migraña episódica es aquella que aparece menos de 15 días al mes, pero aun así puede ser profundamente incapacitante. No es “solo un dolor de cabeza” es una condición neurológica que altera tu energía, tu concentración y tu bienestar emocional.
El tratamiento preventivo se recomienda cuando los ataques son frecuentes, intensos o afectan la calidad de vida. Su objetivo no es eliminar por completo las crisis, sino reducir cuántas veces aparecen, cuánto duran y qué tan fuertes son.
En otras palabras: ayuda a tu cerebro a estar menos “reactivo”.
¿Por qué aparece la migraña? Una mirada sencilla al mecanismo
Aunque la migraña tiene múltiples causas, una de las teorías más aceptadas describe un cerebro que es más sensible de lo habitual. Factores como el estrés, cambios hormonales, ciertos alimentos o la falta de sueño pueden disparar una respuesta exagerada que activa los nervios y vasos sanguíneos del cráneo.
Es como si el cerebro de una persona con migraña viviera con el volumen demasiado alto: pequeños estímulos se convierten en ruidos abrumadores.
Los tratamientos preventivos buscan bajar ese volumen y estabilizar las conexiones neuronales, para que los desencadenantes no generen crisis tan fáciles.
Diagnóstico y opciones de tratamiento: lo que realmente funciona

El diagnóstico de migraña es clínico: se basa en tus síntomas, la frecuencia de los episodios y cómo impactan tu vida. No siempre se necesitan estudios adicionales.
Una vez confirmada, el médico evalúa si es momento de iniciar prevención. Los grupos principales de medicamentos utilizados incluyen.
Betabloqueadores
Medicamentos clásicos que ayudan a estabilizar la respuesta del sistema nervioso. Suelen usarse cuando la persona también presenta ansiedad o hipertensión.
Antidepresivos tricíclicos
Útiles para personas con migraña y problemas de sueño o tensión muscular. No son “para depresión”: se usan en dosis más bajas para modular el dolor.
Anticonvulsivantes
Regulan la actividad eléctrica del cerebro. Son especialmente útiles cuando las crisis son muy recurrentes.
Anticuerpos monoclonales anti-CGRP
Son una de las opciones más modernas y dirigidas específicamente a la migraña. Actúan bloqueando la vía del dolor y suelen ser bien tolerados.
5. Cambios en el estilo de vida
Dormir mejor, hidratarte, gestionar el estrés y tener horarios regulares puede ser tan importante como cualquier medicament0 ninguno de estos tratamientos funciona inmediatamente. La mayoría requiere entre 4 y 8 semanas para mostrar mejoras claras. Por eso, la constancia es clave.
Señales de alerta y recomendaciones útiles
Cuándo hablar con tu neurólogo
Si tienes más de 4 migrañas al mes.
Si el dolor te impide trabajar, estudiar o cuidar de tu familia.
Si el medicamento de rescate ya no te funciona.
Si notas que cada mes las crisis son más intensas o más frecuentes.
Consejos prácticos
Lleva un diario de migraña: anota cuándo comienza, qué comiste, cómo dormiste, y cómo te sentías.
No abuses del analgésico: usarlo más de dos o tres veces por semana puede generar “cefalea por rebote”.
No cambies tratamientos por tu cuenta.
Ten paciencia: la prevención es un proceso gradual pero muy beneficioso.
La migraña no define quién eres, pero sí merece toda tu atención. Cuando trabajamos en prevención, buscamos recuperar tu tranquilidad, tu energía y tu día a día. No estás exagerando: tu dolor es real y tratable. Si sientes que tus crisis te están robando calidad de vida, acércate. Juntos podemos encontrar un plan que funcione para ti, paso a paso y con acompañamiento humano.
Dra. Charinna Di Vanna
Neuróloga- Internista.




Comentarios